La manera como el cuerpo se mueve revela más que trazos de la
personalidad. Aquí tienes algunas maneras de caminar que posiblemente pueden revelar ciertos padecimientos, esto solo es a título orientativo, cualquier sospecha debe ser confirmada por un especialista médico:
- Caderas que se balancean. Pueden indicar debilidad muscular que pueden
conducir a enfermedades en la espalda y piernas. Caminar como si fuera
una supermodelo en la pasarela, puede causar dolores en la espalda. Un
músculo en la región de los glúteos es el usado este tipo de movimiento y
mantiene las caderas estables y las piernas rectas. Por lo tanto, si
los glúteos se menean mucho es señal de que ese músculo está debilitado,
lo que puede ser resultado de una vida sedentaria. Esa debilidad causa
dolores y rigidez en la espalda. Los ejercicios para el fortalecimiento
muscular son indicados para contrarrestar este padecimiento.
- Caminar lento. Puede indicar menor expectativa de vida, diabetes,
artritis y hasta riesgo de demencia. La velocidad con la cual se anda
puede apuntar la longevidad de una persona, según estudio de la
Universidad de Pittsburgh, que evaluó el caminar de 36 mil personas de
la tercera edad, identificó que los que daban pasos más rápidos vivían
más que los demás, que llevaban más tiempo para recorrer la misma
distancia. Otra investigación del Centro Médico de Boston apunta que el
caminar lento indica menos procesos entre las células del cerebro,
problemas de memoria y lentitud para realizar otras tareas.
- Pasos cortos. Puede indicar dificultad para alcanzar el orgasmo,
osteoartritis y el acortamiento de músculos de las piernas debido al uso
de saltos altos. Si la persona no consigue dar pasos amplios, es
posible que sufra de osteoartritis en las caderas. Además los tendones y
gemelos rígidos pueden estar comprometidos por el uso frecuente de
zapatos de tacones altos. Otra posibilidad es la de evitar los problemas
de rodilla si las piernas están totalmente estiradas a la hora de
caminar, acortando los pasos. Además de eso, una investigación publicada
en el Journal of Sexual Medicine, realizada por médicos de Bélgica y
Escocia, apunta que los músculos pélvicos sin elasticidad están
conectados a bloqueos sexuales y que las mujeres que daban pasos más
anchos alcanzaban orgasmos con más facilidad.
- Brazos rígidos. Puede indicar problemas en los hombros, cuello y
espalda. Al caminar, los brazos se mueven ligeramente hacia el lado
opuesto de las piernas, para equilibrar el movimiento, apoyando
principalmente la espalda. Si no existe ese movimiento, los músculos de
la espalda, cuello y hombros son perjudicados. Es más común en personas
sedentarias en la vida adulta.
- Cojear. Puede indicar osteoartritis, cargar bolsas pesadas o que
problemas en las plantas de los pies. Según médicos, es síntoma clásico
de osteoartritis en las caderas. Pero puede ser causado por un hábito
diario, como lo de cargar bolsas pesadas. "El peso comprime uno de los
lados del cuerpo, dejando este lado más acortado", alerta Richard Jones,
de la Universidad de Salford. Inflamaciones en la planta de los pies
también son causas comunes para cojear, un problema que aparece con más
frecuencia en la tercera edad.
- Dificultad para subir escaleras. Puede indicar osteoartritis en las
rodillas y juanetes. Dolores en la parte lateral de los pies al subir y
descender escaleras pueden apuntar hacia la aparición de juanetes,
aunque no haya señal visible del problema. O la cuestión puede estar en
el desgaste de las articulaciones de las rodillas.
- Pisar con fuerza. Puede indicar deficiencia de vitamina B12, diabetes
descontrolada. Cuando los pies tocan el suelo, envían un mensaje al
cerebro, permitiendo que sepamos la altura correcta para levantarlos.
Personas que presentan pérdida de sensibilidad, causada por la
deficiencia de vitamina B12, suelen exagerar en esos movimientos y pisan
con más fuerza en el suelo. Una diabetes no tratada también puede
provocar esa falta de sensibilidad.
- Golpear los pies en el suelo. Puede indicar diabetes descontrolada,
problemas motores, derrame. Golpear los pies en el suelo y hacer ruido
indica que no hay control en los músculos de las piernas y que es
necesario erguirlas más de lo necesario. La diabetes puede afectar los
nervios que envían las señales a los músculos para realizar esos
movimientos. Problemas motores o derrames también pueden afectar o
debilitar tales nervios.
-
Arrastras los pies. Puede indicar mal de Parkinson. La enfermedad es
caracterizada por la pérdida de la capacidad para controlar los músculos
y movimientos, debido a la deficiencia de dopamina en el cerebro.
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