La afición por correr, es una pasión que
comparten millones de personas en el mundo. Los ves por todas partes practicando esta actividad física.
Según los expertos, los retos personales que se traza el
corredor, contribuyen a moldear un carácter particular para enfrentarse a la
carrera de la vida laboral. Es decir que correr puede servir como
entrenamiento para alcanzar metas, pero profesionales.
Si la persona es disciplinada, está comprobado que diferentes
características de su salud mejoran y le permiten mejorar otros aspectos
de su vida, como su trabajo. La capacidad de concentración y
comprensión aumenta, y se mejora la conexión del cerebro con el cuerpo,
por lo que las actividades van a ser más eficientes.
Las personas corren, caminan y andan porque es la actividad física que han
hecho por miles de años, hasta llegar a nuestros días. En la prehistoria, para
comer había que moverse y cazar, y desde entonces nuestros genes no han
cambiado tanto. Nuestra biología está
programada para seguir con el estilo de vida ancestral: ingerir 3.000
calorías diarias y correr más de 10 kilómetros. Pero ahora hay un
desequilibrio en favor de las calorías. La mejor manera de perder el
excedente de calorías es correr. Mil calorías equivalen a 20
kilómetros.
Con el ejercicio intenso se liberan endorfinas -unas hormonas que
tienen un efecto opiáceo- y ésta es la razón por la que correr produce
una sensación de relax y enganche. Las endorfinas se liberan a medida
que se está más entrenado. Para que produzca esa liberación es
necesario, como mínimo, caminar deprisa media hora o 20 minutos de
carrera.
El ser
humano busca luchar y conseguir objetivos, pero en la sociedad actual
impera lo fácil. Por eso, correr (o hacer otro tipo de ejercicio) supone vencer la pereza de los días de
trabajo e ir evolucionando, mejorando nuestras marcas. La carrera suple
las necesidades de autorrealización y nos hace sentirnos bien con
nosotros mismos.
El correr engancha porque el objetivo lo marca uno mismo, es una lucha contra ti mismo y es fácil de hacer. Tiene el
beneficio añadido de ver que consigues objetivos a base de esfuerzo
incrementa la autoestima, sin olvidar que la liberación de endorfinas hace que las cosas se valoren de otra forma y que disminuyan los
trastornos depresivos y la ansiedad. Al final te hace más fuerte
mentalmente.
Por supuesto el correr no te resuelve la vida,
pero te permite afrontar la angustia de otra manera. Aunque las
ventajas del running son evidentes, pero cuando la afición se
convierte en una obsesión, pasa a ser un trabajo más. Por eso, hay que
marcarse también unos periodos de descanso.
Cada vez son más los que se apuntan a calzarse las zapatillas de
correr. En
los cuatro últimos años se ha producido un importante aumento de
corredores y de competiciones populares. Un dato objetivo es que cada
vez hay más personas que terminan una carrera. Más de 16.000 corredores
concluyeron el último maratón de Barcelona y más de 14.000 completaron el
medio maratón de Madrid.
Los expertos coinciden
en que correr hace más fuerte mentalmente a la persona, y suple las
necesidades de autorrealización; características que se ven reflejadas
en su buen desempeño laboral y su determinación para conseguir logros y retos. ¿Correr es de cobardes? No. Se necesita
ser muy valiente para llegar cansado del trabajo, ponerte las zapatillas
y correr varios kilómetros.
Caminar, es el más antiguo de los ejercicios, que tiene enormes beneficios para la salud. Lo aquí expuesto es para las personas sanas que quieren seguir siéndolo y que no saben cómo cuidarse o que no pueden, no quieren o no lo intentan. El objetivo: apoyar a los que se cuidan, animar a los que no lo hacen y dar consejos útiles a ambos. Simplemente mediante el ejercicio de caminar. Ya sabes: "Caminante no hay camino... se hace camino al andar". ¿A qué esperas?
28 mayo 2012
Correr es un entrenamiento para alcanzar metas profesionales
Etiquetas:
correr
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Deja tu comentario...