Con simplemente caminar rápido, al menos
durante tres horas a la semana, podría ser un factor importante en el
tratamiento del cáncer de próstata en los dos años siguientes al
diagnóstico de la enfermedad en los hombres, de acuerdo con un estudio
de la Universidad de California en San Francisco.
En este sentido, para que se lleve a
cabo un buen tratamiento es indispensable que un especialista realice un
diagnóstico de manera oportuna.
Publicado en la revista Cancer
Research, en este estudio se indica que caminar rápido puede ser parte
importante del tratamiento del cáncer de próstata debido a que dicho
ejercicio puede reducir 50% las posibilidades de crecimiento tumoral,
además de detener la propagación de las células cancerígenas.
Luego de un seguimiento por más dos
años realizado a cerca de 1300 hombres diagnosticados con este tipo de
cáncer, los investigadores registraron 117 diferentes tipos de
evolución; entre ellos, la recurrencia de la enfermedad, tumores óseos y
muertes causadas por dicho padecimiento.
Como parte de sus resultados,
observaron que los hombres que caminaban durante al menos tres horas a
la semana eran mucho menos propensos a presentar alguno de esos síntomas
de empeoramiento. La tasa de progresión de la enfermedad que
registraron fue un 57% menor que en aquellos que andaban a ritmo suave y
durante menos tiempo.
Erin Richman, autor principal del
estudio, explica que “caminar con ese ritmo puede tener un efecto en la
progresión del cáncer porque modifica los niveles en sangre de algunas
proteínas que, según se ha demostrado en el laboratorio, estimulan la
propagación de las células cancerígenas”.
Si bien aún es necesario realizar
otra serie de estudios que confirmen los resultados en diferentes
muestras de hombres, se sabe que el ejercicio y un mejor estilo de vida
son partes integrales del tratamiento del cáncer de próstata, resalta
Helen Rippon, jefa de investigación en el Prostate Cancer Charity, en
Estados Unidos.
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