La escena tuvo lugar en el Maratón de Berlín. Un hombre de 40 años se desploma a un kilómetro de la línea de meta. Los servicios médicos no consiguen reanimarlo y terminan certificando su fallecimiento. Las carreras multitudinarias (en la prueba alemana tomaron la salida más de 32.000 corredores) registran con cierta frecuencia algún problema grave entre sus participantes.
El jefe de los servicios médicos de esta competición declaró que, en una población de más de 30.000 personas no es extraño que se produzca una muerte de origen cardiaco. Por lo general, los corredores que fallecen durante un maratón padecen enfermedades de corazón no diagnosticadas. Se trata de individuos con un alto riesgo de sufrir una muerte por esta circunstancia estén o no haciendo ejercicio en ese momento.
Los especialistas en Medicina Deportiva siempre resaltan la importancia de someterse a reconocimientos médicos con anterioridad a probar suerte en una carrera de larga distancia. Aconsejan un examen completo, unido a una prueba de esfuerzo en la que se realice, además, un registro electrocardiográfico.
La paradoja reside en que el ejercicio físico es una forma muy eficaz de prevenir los problemas coronarios. Se sabe que la aterosclerosis está relacionada, además, con la hipertensión, el consumo de tabaco, los niveles elevados de colesterol y con la inactividad física.
¿Cómo predecir qué personas tienen riesgo? Las pruebas que podrían determinarlo son el electrocardiograma de esfuerzo y la angiografía coronaria. El primer 'test', llevado a cabo durante el trabajo físico, muestra alteraciones que indican la posibilidad de una enfermedad cardiaca. La angiografía consigue mayor fiabilidad a la hora de revelar la existencia o no de una alteración en las arterias coronarias. El problema es que se trata de una prueba diagnóstica de tipo invasivo y con cierto riesgo de complicaciones.
Un estudio epidemiológico llevado a cabo en Rhode Island (EEUU) estableció un riesgo de muerte limitado para las personas que corren de forma habitual: de cada 7.600 corredores, un fallecimiento por año. El mismo estudio, controlado desde la Universidad de Stanford, situaba el índice en un óbito por cada 396.000 horas de 'jogging'.
Desde esta última institución se ha matizado que un corredor de 45 años que decide continuar corriendo un año más alcanza un riesgo de muerte considerablemente menor que si optara por un estilo de vida sedentario durante ese periodo.
EN ESPAÑA El año pasado se produjo un caso que conmocionó al atletismo español. Diego García, un maratoniano de altísimo nivel (subcampeón europeo) fallecía de forma instantánea en un entrenamiento. Las investigaciones posteriores concluyeron que el fondista padecía una miocardiopatía arritmogénica biventricular, enfermedad caracterizada por la sustitución de las fibras musculares cardiacas normales por grasa o tejido conjuntivo, que termina desencadenando un ritmo anormal en el corazón.
Seguramente habría tenido esta enfermedad desde su nacimiento. Al principio sería reducida, pero con el paso del tiempo la zona fibrosada iría evolucionando y aumentando. Cuando se le practicó la autopsia era muy extendida, le abarcaba los ventrículos izquierdo y derecho. Por desgracia, esta patología nunca se diagnosticó en los numerosos chequeos médicos a los que se someten los deportistas de la selección española de atletismo.
PD: Para los que practicamos las caminatas los problemas no son tan complicados, pues es un deporte de bajo impacto, pero no esta demás el consultar con los médicos cualquier duda que tenganos relacionado con el ejercicio y nuestra salud.
Caminar, es el más antiguo de los ejercicios, que tiene enormes beneficios para la salud. Lo aquí expuesto es para las personas sanas que quieren seguir siéndolo y que no saben cómo cuidarse o que no pueden, no quieren o no lo intentan. El objetivo: apoyar a los que se cuidan, animar a los que no lo hacen y dar consejos útiles a ambos. Simplemente mediante el ejercicio de caminar. Ya sabes: "Caminante no hay camino... se hace camino al andar". ¿A qué esperas?
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Deja tu comentario...